"Nadie por ser joven vacile en filosofar ni por hallarse viejo de filosofar se fatigue. Pues nadie está demasiado adelantado ni retardado para lo que concierne a la salud de su alma. El que dice que aún no le llegó la hora de filosofar o que ya le ha pasado es como quien dice que no se le presenta o que ya no hay tiempo para la felicidad. De modo que deben filosofar tanto el joven como el viejo: el uno para que, envejeciendo, se rejuvenezca en bienes por el recuerdo agradecido de los pasados, el otro para ser a un tiempo joven y maduro por su serenidad ante el futuro. Así pues, hay que meditar lo que produce la felicidad, ya que cuando está presente lo tenemos todo y, cuando falta, todo lo hacemos por poseerla."


Epicuro: Carta a Meneceo

miércoles, 21 de septiembre de 2011

NECESITO ABRIRME EL PECHO


NECESITO ABRIRME EL PECHO, QUE PESO...
Desesperación, impotencia? Que nombre le doy a eso?
Siento que aun tengo las alas por la espalda
Dame un momento a solas, volare por montañas altas.

Hoy en día busco la libertad.
Seguidor de soñadores, idealistas;
bohemios poco pasivos, perseguidores.

Conoceré el limite, algún día alcanzare la cúspide?
Tocare la cima del éxtasis, cuando llegue donde mas nadie?
Por mientras sigo huellas... espero encontrar caminos vírgenes
Alcanzarlos... atravesarlos... disfrutarlos.

Lo siento... pero le dedico mi tiempo a las palabras.
Son las que mas me comprenden... las unicas que me siguen.
Las que a mis persamientos persiguen... a solo algunos alcanzan.
Lagrimas reciben... suavizan su caida.
Sonrisas interpretan... las mejoran cada dia.
Versos... a ellos les dedico mis noches de triste travesia.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Por Ser Ese...



















Depresión, ¿es tu sombra la que veo otra vez?
¿Vienes a castigarme por ser ese?

El imperfecto a los ojos del espejo.
El que tiene miedo de verse viejo.
El desagradecido con los que menos lo merecen.
El que no sabe qué decir a los que perecen.

El que se da cuenta de las cosas muy tarde.
El que no tiene de qué hacer alarde.
El que perdona fácilmente.
El que cambia de parecer de repente.

El que tira todo al tacho al primer tropiezo.
El cansado de dibujar cada día en el mismo lienzo.
El que da pasos inseguros pues los piensa.
El que ya no reza.

El que busca lo que no existe! Pues nunca lo encuentra.
El que piensa en muchas cosas cuando se concentra.
El que ve a las personas pasar.
El que escribe para ya no pensar.

El que piensa que el peor invento es el dinero.
El conchudo que dice que se debe ser sincero.
El que preferiría estar solo en los ratos de recreo.
El típico tímido empedernido al estar sobrio, creo.

El que no entiende la razón del jolgorio alrededor.
El pesimista y conformista... qué mejor?
El que no conoce a nadie de su cuadra.
El que ignora a la gente que ladra.

El que se queda pensando al recibir un insulto.
El que piensa que se puede ser a la vez imbécil y culto.
El que siente una soga al cuello cualquier noche de tensión.
El que cree en hechos sin fundamento, excepto en la religión.

El que teme a la muerte más cada día.
El que guarda resentimientos en una alcancía.
El que se desvela con la madrugada, y a un papel le cuenta
el soliloquio que tuvo el día que con la depresión se reencuentra.